La mayoría de los niños no son lo suficientemente aventureros para sorber una ostra cruda directamente de la cáscara, y esto es probablemente bueno. Las ostras crudas pueden contener bacterias y toxinas que pueden ser potencialmente mortal para los niños pequeños. ostras cocidas, sin embargo, son seguros si están manipulados y cocinados adecuadamente, y que suministran a su hijo con una fuente de bajo contenido de grasa de proteínas y otros nutrientes esenciales.
Cocinar hace que sea seguro
Las ostras son completamente seguros para que los niños consumen, a condición de que están cocinados correctamente y que su hijo no tiene una alergia a los mariscos. El peligro de ostras crudas o poco cocidas es que pueden estar contaminados con bacterias o parásitos que pueden hacer que su hijo muy enfermo. Cocinar hace ostras seguras mediante la destrucción de estos organismos causantes de enfermedades, de acuerdo con SafeOysters.org.
Correcta manipulación, almacenamiento y cocción
En la compra de ostras, mirar las etiquetas cuidadosamente. Sólo comprar ostras que tienen un número de certificación en el envase, la Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos advierte. Antes de cocinar, deseche los ostras que están rotos o agrietados. Toque cada ostra y tirar a la basura cualquier que no cierran en respuesta a las pulsaciones, la FDA recomienda también. Una vez que las ostras se cocinan, tirar a la basura los que no se abra. ostras de las tiendas que no va a cocinar dentro de dos días en el congelador; de lo contrario, mantenerlos en el refrigerador.
Beneficios nutricionales
Ostras cocidas adecuadamente proporcionar a su hijo con 9,5 gramos de proteína por ostra, y la proteína es esencial durante la infancia, ya que ayuda en el crecimiento normal. Las ostras también suministran hierro, un mineral necesario para la producción de glóbulos rojos. Las ostras también son bajos en grasa, con 2,3 gramos por ostra, de los cuales está saturado solamente 0,5 gramos.
Cuando No Es Seguro
Las ostras crudas pueden estar contaminados con la bacteria Vibrio vulnificus, y consumirla puede ser potencialmente mortal. Las bacterias contaminan las ostras que viven en aguas costeras cálidas, y es más peligroso para las personas con sistemas inmunes comprometidos y determinados problemas de salud, como la diabetes. Incluso una ostra cruda puede exponer a un niño a las bacterias, por lo que un sabor rápida tampoco es aceptable. La única manera de eliminar este peligro es cocinar ostras antes de servir a su hijo.