El dolor pélvico --- aguda y crónica --- es relativamente común en los hombres, aunque no es tan generalizado una queja como lo es para las mujeres. En la mayoría de los casos, el dolor pélvico de larga o corta duración es una señal de que hay un problema en alguna parte de las regiones abdominales o pélvicas inferiores del cuerpo, entre los que destacan el tracto intestinal y el sistema urinario.
Naturaleza del Dolor
El dolor pélvico en los hombres, según la enfermera registrada Gail Hendrickson, puede variar desde una molestia generalizada, pero relativamente leve o intermitente para calambres intensos, dolor punzante. En un artículo en el sitio web de Discovery Health, Hendrickson observa que el malestar puede ser breve y fugaz, intermitente o de larga duración. Dado que el dolor pélvico es una indicación de un problema en alguna parte en esa área general del cuerpo, usted debe informar a su médico tan pronto como sea posible, sobre todo si el dolor es intenso e implacable.
Posibles causas
Dos de las causas más comunes de dolor en la pelvis masculina son la prostatitis, una inflamación de la glándula de la próstata e hiperplasia prostática benigna (HPB), que es un agrandamiento no canceroso de la próstata, según MedlinePlus. HPB se observa con mayor frecuencia en hombres que tienen 50 años o más. Otras causas, según Hendrickson, incluyen las adherencias pélvicas; enfermedades de transmisión sexual, como la gonorrea o la clamidia; peritonitis, una inflamación de la mucosa de la cavidad abdominal; infección urinaria; epididimitis, una inflamación de los tubos que drenan los testículos; cáncer de colon; diverticulosis; gastroenteritis; cálculos renales; y la apendicitis.
Lo que hay que informar al médico
Informe a su médico lo más que pueda acerca de su nivel de dolor y su duración. También querrá saber si el dolor se desencadena o agrava por ninguna actividad en particular, tales como orinar o defecar; si el dolor es calambres, sin brillo, punzante o simplemente un dolor generalizado; si otros síntomas acompañan el dolor, tales como la fiebre; y su nivel de actividad sexual y si se tienen relaciones sexuales sin protección.
Diagnóstico y Tratamiento
Basándose en la descripción de su dolor y la historia médica reciente, el médico es casi seguro que ordenar pruebas. Estos pueden incluir análisis de sangre; análisis de orina, posiblemente incluyendo el estudio microscópico de un cultivo de orina; y las pruebas de imagen, tales como rayos X, tomografía axial computarizada (TC) y la resonancia magnética (RM). El tratamiento dependerá de la condición subyacente que causa el dolor pélvico. Los posibles modos de tratamiento incluyen antibióticos, medicamentos anti-inflamatorios no esteroideos (AINE), la relajación y / o terapia física, medicamentos para el dolor y, en casos extremos, la cirugía.
Pronóstico
Si una infección es responsable de su dolor, la terapia con antibióticos más probable es que resuelve el problema, aunque tendrá que estar atentos a una posible recurrencia. Sin embargo, si algún tipo de tumor canceroso está involucrado, entonces el pronóstico dependerá de qué tan temprano se detecte y lo bien que responde al tratamiento.