El psicoanalista francés Jacques Lacan escribió acerca de cómo los seres humanos son "nacidos en el lenguaje." El significado literal de "bebé" es estar sin habla. Los seres humanos aprenden a hablar y entrar en el mundo del lenguaje natural. Los bebés y los niños aprenden a hablar imitando a sus padres y hermanos. Los psicólogos infantiles suelen distinguir el desarrollo del lenguaje en tres etapas: de uno a dos años de edad, los niños de dos a cuatro, y de cuatro a seis años de edad.
Uno de niños de dos años
Los bebés y los niños aprenden a hablar a través de la imitación de los padres y hermanos y con el estímulo y el refuerzo positivo. Alentar a los sonidos vocales como "ma" y "da". Hacer contacto visual con el bebé y su alabanza en su intento de hablar. Identificar los objetos cotidianos, colores y actividades. La investigación contemporánea muestra que gesticulando y apuntando ayudar significativamente el desarrollo del lenguaje y la adquisición en bebés y niños pequeños. Leer a su hijo es otro elemento esencial del desarrollo del lenguaje. Juguetes y juegos educativos son también herramientas útiles.
De dos a cuatro años de
Hablar con claridad y animar al niño a participar en la conversación. Haga un hábito de repetir lo que el niño dice para demostrar que usted entiende lo que está diciendo. Hacer preguntas ayuda al niño a colocar las palabras en un contexto significativo. Hacer preguntas que requieren un sí o un no. Hablando de una variedad de cosas y el intercambio de ideas enriquece el vocabulario del niño. Haga un hábito de elementos de una conversación o de lectura paráfrasis. Aprender a frase palabras en diferentes formas le da al niño una comprensión más amplia de la lengua. Canciones y rimas infantiles burlan el aprendizaje de idiomas, y también son útiles en la construcción de vocabulario.
De cuatro a seis años de
Reconocer y alentar los esfuerzos de un niño para expresarse. Déle toda su atención e indivisible cuando ella está hablando. Hacer una pausa durante sus conversaciones con el fin de proporcionar una oportunidad para que el niño participe. Comenzar a introducir las palabras y los significados más grandes en el vocabulario de conversación y libros. Pedir al niño a seguir instrucciones más complejas que implican dos o tres pasos. Continúe leyendo para su hijo y conectar las historias con las experiencias de la vida de su hijo.
La escritura y la lectura
Muchos niños comienzan a leer y escribir en unos cinco o seis años de edad. Anime a su hijo a leer y escribir. Aprender a escribir creativamente ayuda al niño a desarrollar sus habilidades de lenguaje y la imaginación. Que la escritura sea una actividad divertida y no se preocupe por la perfección. Dele a su niño de color papeles y marcadores y motivarla para hacer sus propios libros. Incluya a su hijo en las actividades familiares, tales como la escritura de cartas y tarjetas de agradecimiento. Leer los libros que le gusta leer de modo que se puede hablar de las historias, ideas y personajes con ella.