La artritis a menudo hace que las articulaciones dolorosas e inflamadas. Los síntomas de la artritis pueden evitar que el ejercicio, que es una parte beneficiosa de su programa de tratamiento. Si bien hay muchos medicamentos para el dolor disponibles, a menudo tienen efectos secundarios. Sin embargo, también se pueden utilizar tratamientos con hielo y calor para su artritis. El uso de calor y el hielo puede ayudar a manejar sus síntomas, por lo que puede continuar con el ejercicio y mantenerse activo.
Terapia de calor
El uso de calor puede ayudar a reducir los espasmos musculares, rigidez en las articulaciones y rigidez muscular. El calor se utiliza mejor justo antes de cualquier ejercicio o actividad para ayudar a aflojar las articulaciones y los músculos apretados. El calor abre los vasos sanguíneos y aumenta la circulación que puede promover la curación.
Formas de terapia de calor
La terapia de calor puede ser administrado a través de una almohadilla térmica, venda caliente o un baño o una ducha caliente. El uso de una manta eléctrica y colocar la ropa en una secadora antes de usarlos pueden ayudar. Prueba también mojar un paño de cara, colocándolo en una bolsa para microondas y calentarlo durante uno o dos minutos.
Cuándo no utilizar la terapia del calor
No aplique calor a las zonas de la piel que están dañadas. El calor sólo debe aplicarse durante 15 a 20 minutos. Evitar el uso de calor si usted tiene artritis reumatoide y que está teniendo un brote. El calor puede aumentar el nivel de hinchazón y la inflamación.
La terapia con frío
La terapia con frío ayuda a reducir la inflamación y la hinchazón. El frío contrae los vasos sanguíneos y permite que el área de descanso. La terapia con frío también adormece la zona y reduce las sensaciones de dolor.
Formas de terapia de frío
Usted puede comprar bolsas de hielo en la tienda que son instantáneos - sólo los golpea y se convierten en frío. También hay packs que se puede colocar en el congelador. Una versión menos costosa es mantener una bolsa de verduras congeladas, como los guisantes, en su congelador para su uso.
Cómo utilizar la terapia de frío
Siempre coloque una toalla entre el hielo y la piel. No utilizar la terapia de frío en las zonas con heridas o llagas abiertas. Tenga cuidado con la terapia de frío en las zonas donde existe una disminución de la circulación. La terapia con frío sólo debe aplicarse durante 10 a 15 minutos a la vez.