La artritis reumatoide es una enfermedad crónica que causa inflamación en revestimientos de las articulaciones, especialmente en los pies y las manos. Esto da lugar a dolor en las articulaciones, rigidez, hinchazón y, potencialmente, puede conducir a un deterioro de los huesos. Si bien no existe una cura para la artritis reumatoide, el ejercicio es un tratamiento común. El ejercicio en el agua es un tratamiento particularmente beneficioso, ya que proporciona flotabilidad, haciendo movimientos suaves de las articulaciones. El agua también proporciona un nivel de resistencia que ayuda a los pacientes con artritis reumatoide fortalecer los músculos.
Ejercicios de agua en el hogar
Si desea realizar ejercicios en el agua artritis reumatoide en el hogar, usted necesitará una piscina o bañera de hidromasaje. De acuerdo con la Fundación Americana de la artritis en Arthritis.org, si un médico u otro profesional de la medicina que requiere para realizar ejercicios en el agua para la artritis reumatoide, la compra y la instalación de una piscina o bañera de hidromasaje puede venir con una deducción de impuestos total o parcial (según el lugar de vivir). Es importante que hable con un contador o un abogado para ver qué se aplican las deducciones en su caso particular. Los tipos de ejercicios de rehabilitación que haces en casa dependerá en gran medida por la forma y tamaño del espacio acuático disponible. Las piscinas son preferidos porque proporcionan más espacio que le permita realizar ejercicios aeróbicos más enérgicas. Si se hace ejercicio en una piscina o bañera de hidromasaje, es importante recordar que es posible que necesite ayuda entrar y salir del agua. Asegúrese de que haya alguien que pueda ayudarle.
Unirse a una clase
Si no tiene acceso a su propia piscina o bañera caliente, que siempre puede utilizar las facilidades proporcionadas por un gimnasio o centro comunitario local (como el YMCA). Si bien se puede utilizar piscinas o jacuzzis en lugares como éste durante las sesiones de natación libres o abiertas, puede ser más beneficioso para unirse a una clase de ejercicios en el agua diseñada específicamente para los enfermos de artritis y las personas con enfermedades debilitantes similares.
De acuerdo con Athritis.org, estas clases se llevan a cabo típicamente de dos a tres veces a la semana, y duran entre 45 a 60 minutos. Un instructor capacitado ejecuta cada clase, que puede ayudarle a ejercer de manera efectiva y segura.
Ejercicios sugeridos
De acuerdo con Arthritis.org, los tres tipos más importantes de ejercicio para la artritis reumatoide son la flexibilidad, fortalecimiento y ejercicios aeróbicos (o cardiovasculares). Puede aumentar la flexibilidad mediante la realización de tramos de rango de movimiento (a través del yoga, tai chi o su propia rutina) en una piscina o bañera de hidromasaje. Uno de los ejercicios de flexibilidad común implica que se inclina contra la parte posterior de la piscina (que se aferra a la parte de apoyo), y levantando lentamente una rodilla hasta el pecho. Puede rodillas entonces alternos. Uno de los ejercicios en el agua fortalecimiento simple requiere que usted pueda sentarse en los escalones de escalera o en su piscina o bañera de hidromasaje (con las rodillas dobladas) y alternativo de enderezamiento cada pierna. Para ejercicios aeróbicos de agua, se recomienda a los pacientes con artritis reumatoide a nadar.