De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, aproximadamente el 20 por ciento de los 4 millones de mujeres estadounidenses que dan a luz cada año de experiencia una complicación durante el embarazo. Aunque la mayoría de los embarazos difíciles se pueden manejar de forma segura, la clave es reconocer las señales de advertencia y la búsqueda de atención de una partera u obstetra. Las señales de advertencia de un embarazo difícil a menudo aparecen al principio del embarazo.
Sangría
El sangrado puede ocurrir si la placenta se ha quedado demasiado baja o si se separa de la pared uterina, o puede haber ninguna causa identificable.
Anemia
La fatiga extrema, debilidad y mareos pueden ser una señal de advertencia de la anemia - una falta de adecuada de hierro en el torrente sanguíneo. La anemia y la fatiga resultante puede causar un embarazo difícil.
Diabetes gestacional
Si los niveles de azúcar en la sangre son demasiado altos en el embarazo - una condición llamada diabetes gestacional - el embarazo puede ser complicado por la necesidad de estrictas las observaciones de control de la dieta o insulina.
Alta presion sanguinea
La presión arterial alta puede presentar al principio del embarazo, lo que exige una estrecha vigilancia para asegurarse de que no se convierta en la preeclampsia, una complicación del embarazo difícil.
Hiperemesis gravídica
Una condición llamada hiperemesis gravídica en el que la madre tiene náuseas y vómito extremos, puede causar dificultades, ya que puede evitar que la madre recibiendo suficientes nutrientes.