Una persona sufre un accidente cerebrovascular cuando se interrumpe el flujo de sangre al cerebro. La interrupción puede ser causada por la obstrucción o hemorragia. La función del cerebro sufre de falta de sangre y la persona puede llegar a ser paralizado, perder la capacidad de hablar o ver, y esto afecta neurológica puede llegar a ser permanente. Según el Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares, 700.000 estadounidenses sufren accidentes cerebrovasculares cada año y aproximadamente dos tercios de las víctimas sobreviven. A pesar de que la tasa de supervivencia de los accidentes cerebrovasculares se ha incrementado desde el año 2000, los accidentes cerebrovasculares número total ha aumentado, y los accidentes cerebrovasculares son la segunda causa de muerte en el mundo. A pesar de la lesión cerebral sufrida durante la carrera no es curable, los efectos pueden ser disminuidos a través de la rehabilitación después de un derrame cerebral. Esta terapia se inicia dentro de las veinticuatro horas siguientes se estabiliza la salud del paciente, y se prolonga durante meses o incluso años, dependiendo de las necesidades.
Rango pasiva de ejercicios de movimiento
Durante gama de ejercicios de movimiento pasivo, el fisioterapeuta, enfermera o asistente mueve las extremidades de la persona afectada. Los ejercicios pasivos son necesarios cuando el paciente no puede moverse debido a la parálisis. El terapeuta suavemente y poco a poco se mueve el miembro a través de todo el rango de movimiento con el fin de mantener la flexibilidad, mantener el flujo de sangre, y para prevenir de apriete. Estos ejercicios también ayudan a prevenir las escaras de la formación.
Rango activo de ejercicios de movimiento
Si el daño por apoplejía no es demasiado grave, o si el paciente se ha recuperado una cierta movilidad, se practican rango activo de ejercicios de movimiento. El paciente ejerce sus músculos sin ayuda, ya sea con el uso de pesas ligeras o simplemente contra la gravedad. Ejemplos de ejercicios de movimiento de brazos y piernas son los ascensores, y la rotación de los brazos. El siguiente paso progresivo siguiendo estos ejercicios es fortalecer los músculos de ejercicio, lo que implica el uso de bandas de resistencia o pesas ligeras para aumentar el tamaño muscular y mejorar la resistencia.
Los ejercicios de equilibrio y coordinación
Ejercicios de coordinación enseñan a los pacientes con ictus para realizar ciertas tareas, como recoger un lápiz o tocarse la nariz. Los ejercicios de equilibrio implica que el paciente desplazar su peso hacia atrás y adelante entre las piernas izquierda y derecha, comúnmente mediante la ayuda de barras paralelas. La amplitud de movimiento y la fuerza debe ser alcanzado antes de que se llevaron a cabo ejercicios de equilibrio.
Los ejercicios de deambulación
Antes de la deambulación, o caminar, el ejercicio puede comenzar, el paciente necesita primero trabajar en el rango de movimiento, el equilibrio y la coordinación. Una vez alcanzados estos objetivos, el paciente re-aprende a caminar con la ayuda del terapeuta y barras paralelas. La progresión adicional implica un andador, muletas o un bastón. La práctica continúa y el paciente aprende a bajar y en bordillos y subir escaleras.