Un disco de arranque de inicio permite a un equipo con Windows 9x para arrancar con un sistema operativo básico, sin necesidad de cargar Windows desde el disco duro. Esto puede ayudar a solucionar problemas con el sistema si Windows no se carga correctamente. Las versiones más recientes de Windows que utilizan el sistema de archivos NTFS no pueden utilizar un disco de inicio, pero pueden modificar los archivos en uno. En lugar de ello dependen de CDs de inicio creados por el sistema operativo. El contenido de estos CDs no se pueden modificar. Pero si tiene un ordenador sigue con Windows 95 a Windows Me, puede modificar sus discos de arranque.
Instrucciones
1 Encienda el ordenador e inserte el disco en la unidad de disco.
2 Haga doble clic en el icono "Mi PC" en el escritorio o en el menú Inicio de Windows 98 o Windows XP. Para Vista o Windows 7, el icono se llama "PC" y se encuentra en el menú Inicio.
3 Haga doble clic en la unidad de disquete para acceder a los contenidos del disco de inicio. La unidad de disco es generalmente letra A. Copia todos los archivos que desea añadir al disco de inicio haciendo clic derecho sobre ellos y seleccionando "Copiar". Pegar pegarlos en la unidad A haciendo clic derecho en la ventana y seleccionando "Pegar".
4 Compruebe la lista para el archivo que desea modificar. Config.sys y autoexec.bat son responsables de la carga de los conductores y la ejecución de programas. Ellos son archivos de texto que se pueden modificar en la libreta de Windows.
5 Haga doble clic en los archivos para abrirlos. Añadir las instrucciones y líneas de código modificadas escribiendo en ellos al final.