El prolapso uterino es una condición médica que resulta de la debilitamiento de los músculos y ligamentos en la región pélvica de una mujer. Una vez diagnosticada por un médico después de un examen pélvico, hay varias maneras de tratar el prolapso uterino. Algunos de los tratamientos deben ser administrados por un médico, mientras que otros se pueden hacer de forma rutinaria por el paciente. Sigue leyendo para saber cómo tratar el prolapso uterino.
Instrucciones
1 a fortalecer los músculos del suelo pélvico con ejercicios de Kegel, que implican de forma natural en tensionar y relajar la zona vaginal. Básicamente, este ejercicio consiste en simular el movimiento de retener la orina. Mantenga los músculos apretados durante unos segundos y relaje. Repetir 10 veces.
2 Consulte con su médico para ver si él piensa que un pesario es necesario. Este es un dispositivo circular que se inserta debajo de la parte inferior del útero, que sostiene la matriz en su lugar.
3 Revisión de los riesgos y beneficios de la terapia de reemplazo de estrógeno (ERT). ERT podría reducir aún más el debilitamiento de los músculos de la pelvis, lo que ahorra al paciente de un tratamiento adicional drástica.
4 Considerar tratamientos quirúrgicos. El útero puede ser mantenido en su lugar por un cabestrillo implantado quirúrgicamente, por lo que es imposible que el útero para prolapso. Otra alternativa es la extirpación quirúrgica del útero a través de un procedimiento llamado una histerectomía.
5 Bajar de peso, si es posible. Asegúrese de seguir una dieta saludable y hacer ejercicio con regularidad. Cualquier aumento de peso puede hacer que empeore el prolapso.
6 Práctica técnicas apropiadas para levantar peso. Levantar incorrectamente puede poner exceso de tensión en los músculos de la pelvis, lo que resulta en prolapso.
Consejos y advertencias
- Si considerando seriamente la posibilidad de tomar la terapia de reemplazo de estrógeno, asegúrese de hablar sobre los riesgos de tomar estrógenos con su médico. Asegúrese de que los beneficios serán mayores que los riesgos.